El Salmo 34:8 nos lanza un desafío directo: «Gustad, y ved que es bueno Jehová; dichoso el hombre que confía en él». No se trata de un conocimiento teórico sobre Dios, sino de una experiencia transformadora que solo se logra cuando decidimos probar su bondad por nosotros mismos.
¿Qué significa «gustar» de Dios?
- Más que escuchar, experimentar:
- No basta con saber sobre Dios; hay que vivirlo.
- Como probar un manjar: no sabes su sabor hasta que lo llevas a tus labios.
- Confianza activa:
- «Dichoso el que confía en él» no es un estado pasivo, sino una elección diaria.
- Ejemplo: Como un niño que salta a los brazos de su padre, sabiendo que lo sostendrá.
- Seguridad en la tormenta:
- La confianza en Dios no evita las dificultades, pero las transforma.
- «Aunque camine por valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno» (Salmo 23:4).
Reflexión práctica:
- Hoy: Toma un momento para recordar una vez en que Dios te sostuvo. ¿Fue en una enfermedad, una pérdida, un miedo? Ese es su sabor.
- Oración: «Señor, quiero probarte hoy. Ayúdame a confiar en ti no solo con palabras, sino con mi vida».
Versículo clave para memorizar: «Gustad, y ved que es bueno Jehová» (Salmo 34:8).
Hashtags: #FeQueSePrueba #ConfianzaEnDios #ExperienciaConDios #Salmo34