El Alto Manhattan está sumido en la incertidumbre tras la desaparición de Rhony Ramos, un joven padre dominicano de 29 años que no regresó a casa después de salir hacia su trabajo el pasado 28 de noviembre. Su familia, desesperada, ha desplegado una intensa campaña de búsqueda, repartiendo volantes por barrios como Pelham Parkway, Fordham y Castle Hill, mientras los vecinos se unen en vigilias y oraciones.
Ramos, residente de Washington Heights, solía tomar el tren A cada mañana para llegar al Lower East Side, donde trabajaba como portero. Sin embargo, ese día no llegó a su destino, y desde las 6:00 a.m. no se ha sabido nada de él. Su teléfono, apagado desde la 1:00 p.m., ha aumentado la angustia de sus seres queridos, especialmente de sus dos hijos pequeños, de 6 y 7 años, quienes no comprenden su ausencia.
La comunidad dominicana en Nueva York ha mostrado un apoyo masivo, organizando cadenas de oración y presionando a las autoridades para que intensifiquen la búsqueda. Mientras tanto, el congresista Adriano Espaillat ha cuestionado públicamente la falta de avances por parte del cuartel 33 del NYPD, exigiendo mayor transparencia en el caso.
 
				
















