¿Puede República Dominicana responder con aranceles recíprocos?
Turismo, pasajes, alimentos y bebidas: ¿se verán afectados?
Aunque el arancel se aplica directamente a productos, el turismo podría recibir un impacto indirecto, ya que:
- Aumentarían los costos de los pasajes aéreos por mayores gastos operativos de las aerolíneas (mantenimiento, repuestos importados).
- Subirían los precios de alimentos y bebidas alcohólicas importadas que abastecen al sector hotelero.
- Podrían producirse pérdidas de empleos en el sector turístico y hotelero.
- Se anticipa una posible disminución de inversiones inmobiliarias turísticas y hoteleras.
La percepción de inestabilidad económica podría llevar a que turistas norteamericanos reconsideren sus viajes.
Maritza De León, hotelera en Punta Cana, comentó:
«El turismo no es solo sol y playa. Nosotros dependemos de productos importados para ofrecer calidad. Si suben los costos, o perdemos competitividad o subimos precios y perdemos turistas.»
Por José Zabala, creador de contenido
New York / Santo Domingo – 2 de abril de 2025 : En una movida que ha sacudido la economía dominicana y de varios países de América Latina, el presidente Donald Trump anunció este miércoles desde el Jardín de Rosas de la Casa Blanca la imposición de un arancel del 10 % a todos los productos que entren a los Estados Unidos desde la República Dominicana, como parte de su política comercial nacionalista bajo el lema “Make America Wealthy Again” («Hagamos que Estados Unidos vuelva a ser rico»).
El mandatario justificó la medida alegando una «emergencia nacional» derivada de lo que considera una desventaja comercial para su país. Los aranceles comenzarán a aplicarse este sábado 5 de abril de 2025.
Dolor económico a corto plazo para esperar beneficios a largo plazo
Esta frase resume lo que podría enfrentar la República Dominicana ante esta nueva realidad. Significa aceptar sacrificios o dificultades económicas inmediatas (como aumento de precios, pérdida de empleos, caída en exportaciones) con la esperanza de que esos sacrificios traigan beneficios mayores en el futuro, tales como:
- Apertura a nuevos mercados internacionales
- Fortalecimiento de la producción local
- Mejor preparación económica
- Mayor independencia comercial
En contexto:
- El dolor a corto plazo: impacto negativo del 10 % de arancel: pérdida de divisas, empleos, competitividad.
- El beneficio a largo plazo: oportunidad para diversificar exportaciones, fortalecer la industria nacional y reducir la dependencia de EE.UU.
Impacto directo a bienes y servicios dominicanos
Según el Ministerio de Industria, Comercio y Mipymes (MICM), en 2024 más del 53 % de las exportaciones dominicanas se dirigieron al mercado estadounidense. Esto representa un golpe directo a productos tradicionales como:
- Azúcar
- Café
- Tabaco
- Cacao
- Textiles y productos de zonas francas
- Frutas tropicales
- Dispositivos médicos y electrónicos
La medida afectará especialmente a las zonas francas, pilares económicos que generan miles de empleos y aportan divisas al país. Los aranceles de Trump son «un duro golpe» para las exportaciones dominicanas.
¿Puede República Dominicana responder con aranceles recíprocos?
Legalmente, sí. Sin embargo, establecer aranceles recíprocos podría traer consecuencias más negativas que positivas, debido al fuerte déficit comercial de US$4,645 millones que el país mantiene con EE.UU.
Un economista dominicano advirtió:
«El país no tiene la capacidad económica ni el poder de consumo interno que tiene EE.UU. como para entrar en una guerra comercial directa. Responder con aranceles podría encarecer las importaciones de alimentos, medicinas, combustibles y tecnología, afectando al consumidor común.»
¿Está preparado el país para resistir este arancel?
Desde el punto de vista económico, la respuesta es no completamente. Aunque existen tratados con otros países y bloques como la Unión Europea y Centroamérica, el mercado estadounidense sigue siendo el principal socio comercial y fuente de divisas para la nación.
El gobierno dominicano deberá replantearse estrategias urgentes como:
- Buscar nuevos mercados internacionales
- Incentivar e invertir en la producción local
- Negociar con diplomacia un trato especial
- Proteger las inversiones extranjeras existentes
Voces desde República Dominicana
Rosa Méndez, comerciante en Santiago:
«Esto va a subir todo. Lo que traigo de Miami para vender aquí va a salir más caro. Y eso significa menos clientes y menos ganancia.»
Luis Cordero, joven emprendedor en San Cristóbal:
«Yo fabrico camisas en una zona franca que exporta a Nueva York. Con ese arancel, puede que se reduzca el volumen de pedidos. Eso me preocupa mucho.»
¿Y ahora qué?
La imposición de un arancel del 10 % por parte del presidente Trump a los productos dominicanos representa un desafío importante para la economía del país. Aunque la medida busca fortalecer la manufactura estadounidense, las consecuencias colaterales podrían desatar inflación, pérdida de empleos y un retroceso económico en la región.
La República Dominicana deberá apelar a la diplomacia, la diversificación comercial y la innovación local para amortiguar el impacto y defender sus intereses, evitando caer en una guerra comercial que no puede ganar.
José Zabala – Creador de contenido
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(AP FOTO/MARK SCHIEFELBEIN)/Diario Libre
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