Chris Arsenault, conocido por su dedicación a los gatos rescatados, murió trágicamente en un incendio que consumió su santuario en Long Island, Nueva York. El fuego comenzó alrededor de las 7:15 a.m. del lunes en «Happy Cat Sanctuary», un refugio que albergaba a más de 100 gatos. Arsenault, de 65 años, regresó a la casa en un intento desesperado por salvar a los animales, pero no logró sobrevivir.
Las autoridades encontraron a Arsenault en la planta baja de la casa, rodeado de los gatos que tanto amaba. La escena fue devastadora, con aproximadamente 100 gatos, algunos de los cuales no sobrevivieron al incendio. La causa del fuego aún está bajo investigación, y la comunidad espera respuestas sobre cómo ocurrió esta tragedia.
Arsenault comenzó su misión de rescate en 2006, después de la trágica muerte de su hijo en un accidente de motocicleta. Desde entonces, dedicó su vida a cuidar de los gatos, viviendo en condiciones modestas para poder destinar todos sus recursos a los animales. «Cada centavo que ganaba, todo lo que recolectaba, lo destinaba a los animales», comentó su amiga Lisa Jaeger.
La comunidad de rescate animal está conmocionada por la pérdida de Arsenault y los gatos. «Era un hombre increíblemente generoso», dijo Ellen Pavlakis. «Los gatos estaban felices y seguros con él. Esto es una tragedia inmensa». La Sociedad para la Prevención de la Crueldad hacia los Animales (SPCA) del condado de Suffolk y otros grupos locales están colaborando para ayudar a los animales sobrevivientes.
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