Picoteando el Espectáculo
Sólo los que han vivido la experiencia se pueden imaginar cómo es coexistir en medio de una familia de 13 hermanos, en un campo del Cibao, La Cueva de Cevicos, en Cotuí, con unos padres que el único sustento para mantenerse era trabajar la tierra. Así fueron los primeros años de Joe Veras (1 de mayo de 1964).
A Joe, el cuarto de los hermanos, le tocó trabajar junto a su padre desde muy chico e ir a la escuela en medio de las precariedades.
“Todavía me pregunto cómo era que papá y mamá hacían para darles de comer a 13 bocas, cómo pudieron enviarnos a la escuela, y cubrir las necesidades básicas, sin tener absolutamente nada”, se pregunta el bachatero.
En la década de los 70 la vida de José Vera, como es su nombre de pila, transcurría entre los estudios, el trabajo en el campo y la música que escuchaba a través de Radio Santa María, una de estación radial ubicada en La Vega, con una programación enfocada a orientar a la sociedad.
El compositor
Era tanta la incidencia de la emisora en todo conglomerado social, que siendo adolescente Joe se inspiró en escribir su primera composición gracia a un concurso que organizaba Radio Santa María, de canciones dedicadas a la naturaleza.
“Escribí mi primera canción motivado por ese concurso, ahí comenzó a despertar mi talento como compositor y la llevé a la emisora, pero no sucedió nada”, ríe a carcajada el artista al rememorar el recuerdo.
El talento como compositor desborda cuando la vida le da oportunidad de iniciar su carrera, en 1996, arrancando con el éxito “La envidia no mata”. Otros éxitos han sido “El hombre de tu vida”, “Cartas de verano”, “Esa pared”, “Inténtalo tú” y “Acéptame como soy” y “El molde”.
El corazón de Joe latía cada vez, que a través de la radio, escuchaba artistas como Leo Dan, El Jibarito de Lares, Luis Segura, Leonardo Paniagua, José Manuel Calderón y José José.
La música le hacía vibrar, pero era un sueño que acariciaba sin muchas esperanzas.
De niño, construía su propia guitarra con pedazos de madera, pero para sus padres se trataba de un juego. También en la adolescencia cantó el en coro de la parroquia de su comunidad.
Al concluir el bachillerato inició sus estudios en agronomía, ya que su padre, el fenecido Sotero Veras, se opuso tajantemente a que fuera artista.
Fuente Ynmaculada Cruz Hierro-listin diario