Rusia revela el misil balístico “Oreshnik”, una nueva amenaza de alcance intermedio
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, sorprendió al mundo al ordenar el inicio de la producción en serie del misil balístico “Oreshnik” (“avellano” en ruso). Este proyecto militar, hasta ahora desconocido, ha despertado alarmas internacionales por sus capacidades de alcance y potencial destructivo. Según Putin, el misil ya está siendo probado en condiciones de combate y promete ser una pieza clave en el arsenal estratégico de Rusia.
Un arma de alcance medio con capacidades impresionantes
El “Oreshnik” es un misil balístico de alcance intermedio, capaz de atacar objetivos entre 3,000 y 5,500 kilómetros. Este rango lo posiciona como una amenaza directa para buena parte de Europa y potencialmente la costa oeste de Estados Unidos si se lanza desde el extremo oriental de Rusia.
Cerca de 1,000 kilómetros separan el punto de lanzamiento en Astracán, Rusia, y el objetivo impactado en Dnipró, Ucrania. Según el servicio de inteligencia militar ucraniano (GUR), el tiempo de vuelo fue de apenas 15 minutos, subrayando la rapidez y letalidad del misil.
El jefe de la inteligencia militar ucraniana, Kirilo Budanov, reveló que “Oreshnik” es solo un nombre en clave del proyecto, cuyo nombre oficial es “Kedr”. Inicialmente se pensaba que solo se habían fabricado dos prototipos, pero Putin aseguró que ya hay una reserva lista para su uso.
Innovaciones tecnológicas y capacidades destructivas
“Oreshnik” está basado en el modelo ruso RS-26 Rubezh, un misil balístico intercontinental desarrollado en 2012. Este nuevo sistema combina avances hipersónicos y ojivas de maniobra que lo hacen extremadamente difícil de interceptar.
• Velocidad extrema: Puede alcanzar velocidades de hasta Mach 10 (alrededor de 12,350 km/h).
• Cargas múltiples: El misil puede transportar hasta seis ojivas independientes, capaces de seguir trayectorias separadas al ingresar a la atmósfera.
• Dificultad de interceptación: Según Putin, ningún sistema de defensa aérea actual, incluyendo los estadounidenses en Europa, puede detener estos misiles.
Implicaciones geopolíticas
El desarrollo del “Oreshnik” llega en un contexto global marcado por tensiones crecientes entre las principales potencias. Hasta 2019, Rusia y Estados Unidos tenían prohibido desarrollar este tipo de armas bajo el Tratado de Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio (INF) de 1987. Sin embargo, la salida de Estados Unidos del tratado bajo la administración de Donald Trump marcó el inicio de una nueva carrera armamentística.
El Pentágono, a través de su portavoz adjunta Sabrina Singh, reconoció las capacidades avanzadas del misil pero destacó su alto costo, lo que podría limitar su producción masiva.
Un llamado a la cautela
Expertos en desarme, como Pavel Podvig del Instituto de Naciones Unidas para la Investigación sobre el Desarme (Unidir), advierten que “Oreshnik” podría desestabilizar aún más la seguridad global. Su capacidad para portar ojivas nucleares lo convierte en un arma que podría alterar significativamente el equilibrio estratégico.
Mientras tanto, el impacto político y militar de este desarrollo continúa siendo objeto de análisis, con países occidentales atentos a los próximos movimientos de Moscú en el escenario global.
Por: Francisco Núñez, franciscoeditordigital@gmail.com