Katrina Armstrong, quien ejerció como presidenta interina de Columbia University durante siete meses, renunció ayer. Su decisión llega días después de que la universidad accediera a devolver $400 millones en fondos federales, exigidos por el gobierno de Donald Trump.
La Junta Directiva de Columbia informó que Armstrong volverá al Irving Medical Center. David J. Greenwald, presidente de la Junta, agradeció su dedicación y espera con interés sus futuras contribuciones.
Claire Shipman, copresidenta de la Junta, ha sido designada presidenta interina. Shipman, con una trayectoria de 15 años en ABC News, asume el cargo con el compromiso de actuar con urgencia y colaborar con el profesorado para proteger a los estudiantes y defender la libertad académica.
La renuncia de Armstrong se produce en un contexto de presión federal sobre Columbia, que enfrenta acusaciones de inacción ante el acoso a estudiantes judíos, lo que resultó en la cancelación de $400 millones en subvenciones.