Nueva York, 24 de agosto de 2025 — Ismael «El Mayo» Zambada, cofundador y líder histórico del Cartel de Sinaloa, se declarará culpable este lunes ante un tribunal federal en Nueva York, en un acuerdo que podría sacar a la luz secretos clave del narcotráfico mexicano y reconfigurar el poder dentro de una de las organizaciones criminales más poderosas del mundo.
Un giro inesperado en la lucha contra el narcotráfico
Zambada, de 77 años, enfrenta 17 cargos relacionados con narcotráfico, lavado de dinero y uso de armas, tras más de medio siglo dedicado al crimen organizado. Aunque inicialmente la Fiscalía de EE.UU. había considerado la pena de muerte, finalmente optó por retirar esa posibilidad a cambio de información valiosa que el «capo» podría proporcionar.
Este cambio de estrategia no solo evita un juicio prolongado, sino que abre la puerta a que Zambada negocie beneficios, como:
- Reducción de su condena.
- Evitar prisión en un penal de máxima seguridad.
- Mayor acceso a su familia, dado su deteriorado estado de salud.
¿Qué revelará «El Mayo»?
Aunque aún no está claro si Zambada reconocerá todos los delitos o solo algunos, su declaración podría incluir detalles sobre:
- Operaciones internas del Cartel de Sinaloa, incluyendo rutas de tráfico, alianzas con otros cárteles y métodos de lavado de dinero.
- Colusión con autoridades mexicanas y estadounidenses, un tema que ha sido central en juicios previos, como el de Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública de México, condenado en 2024 por vínculos con el narcotráfico.
- Información sobre otros líderes del narcotráfico, como los hijos de Joaquín «El Chapo» Guzmán, algunos de los cuales también están en procesos de negociación con la justicia estadounidense.
El contexto de su detención y extradición
Zambada fue detenido en julio de 2024 en Nuevo México, tras ser entregado por uno de los hijos de «El Chapo», Joaquín Guzmán López, en lo que parece haber sido una trampa interna dentro del cartel. Desde entonces, ha estado bajo custodia en EE.UU., donde inicialmente se declaró no culpable. Sin embargo, tras la decisión de la Fiscalía de no buscar la pena de muerte, su abogado, Frank Pérez, sugirió que un acuerdo era posible.
Un precedente que podría cambiar las reglas del juego
La declaración de culpabilidad de Zambada se produce en un momento en que varios líderes del narcotráfico mexicano están negociando acuerdos similares con la justicia estadounidense. Entre ellos destacan:
- Joaquín Guzmán López, hijo de «El Chapo», quien también fue detenido junto a Zambada y está en proceso de negociación.
- Ovidio Guzmán López, otro hijo de «El Chapo», quien ya se declaró culpable en julio de 2025 y podría estar proporcionando información a cambio de una reducción de pena.
Este escenario plantea preguntas clave sobre el futuro del Cartel de Sinaloa:
- ¿Quién asumirá el liderazgo tras la caída de sus figuras históricas?
- ¿Cómo afectará esto a las alianzas con otros cárteles, como el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG)?
- ¿Qué impacto tendrá en el tráfico de drogas hacia EE.UU., especialmente de fentanilo, una de las principales preocupaciones de las autoridades estadounidenses?
El papel de la justicia estadounidense
El juez Brian Cogan será el encargado de dictar la sentencia contra Zambada, un proceso que podría extenderse hasta seis meses, dependiendo de la calidad y utilidad de la información que proporcione. Mientras tanto, la Fiscalía analizará los datos aportados para determinar si cumplen con las expectativas de cooperación.
Este caso no solo marca un hito en la lucha contra el narcotráfico, sino que también expone las tensiones entre la justicia estadounidense y mexicana, donde la corrupción y la colusión con el crimen organizado siguen siendo un problema sin resolver.
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