El Victoria’s Secret Fashion Show regresó esta noche con todo su esplendor, reafirmando su lugar como uno de los eventos más esperados del año en el mundo de la moda. Tras su reactivación en 2024, el desfile volvió a encender las pasarelas con una edición que combinó el glamour clásico de la marca con nuevos elementos que buscan conectar con las demandas de una audiencia global más diversa y exigente. En el Steiner Studios de Brooklyn, Nueva York, modelos como Gigi Hadid, Emily Ratajkowski y Behati Prinsloo fueron las estrellas indiscutibles de una noche que buscó recapturar la magia de las ediciones más memorables, pero con un enfoque renovado que incluye mayor inclusión y modernidad.
El debut de Emily Ratajkowski en la pasarela de Victoria’s Secret fue uno de los momentos más celebrados de la noche. La modelo, vestida con un conjunto en rosa pálido y alas florales, desfiló con una confianza y elegancia que la convirtieron en el centro de todas las miradas. Por su parte, Gigi Hadid, una de las modelos más emblemáticas de la marca, brilló con dos looks distintos: uno en rosa con una capa floral y otro en blanco con alas angélicas, demostrando una vez más por qué es una de las favoritas del público. Mientras tanto, Behati Prinsloo, quien regresó al desfile tras una pausa, deslumbró con un conjunto nude con diseños rayados y una capa dorada, caminando con una presencia que recordó su estatus de leyenda en el mundo de Victoria’s Secret.
El espectáculo no solo destacó por las modelos, sino también por una producción de alto nivel que incluyó actuaciones musicales en vivo de artistas como Missy Elliott, Madison Beer, Karol G y el grupo TWICE, quienes aportaron un toque de energía y diversidad al evento. La transmisión global a través de Prime Video y las redes sociales de la marca permitió que millones de personas en todo el mundo fueran testigos de un show que buscó recuperar la grandeza de otras épocas, pero con un enfoque contemporáneo que incluye coreografías innovadoras, vestuarios elaborados y una puesta en escena que combinó luces, música y movimiento de manera espectacular. El evento, que se desarrolló en un escenario cuidadosamente diseñado, dejó claro que Victoria’s Secret no ha perdido su capacidad para sorprender y emocionar a su audiencia.
Sin embargo, el relanzamiento del show enfrenta el desafío de adaptarse a un mundo de la moda que exige más diversidad, inclusión y autenticidad. Aunque el desfile incluyó una mezcla de modelos consagradas y nuevas caras, algunos críticos señalan que la marca aún tiene trabajo por hacer para reflejar plenamente la diversidad de cuerpos y culturas que existen hoy. A pesar de esto, la presencia de figuras como Bella Hadid, Ashley Graham y Candice Swanepoel, junto al debut de Ratajkowski y el regreso de Prinsloo, demuestran que Victoria’s Secret está comprometida con una evolución que busca mantener su relevancia en una industria en constante cambio.
El Victoria’s Secret Fashion Show 2025 no solo fue un espectáculo visual, sino también una declaración de intenciones: la marca está decidida a reinventarse sin perder la esencia que la hizo famosa. Con una combinación de glamour, música y producción de alto nivel, el desfile demostró que, aunque el mundo de la moda ha evolucionado, Victoria’s Secret sigue siendo un símbolo de elegancia y fantasía. El desafío ahora será mantener este impulso en las próximas ediciones, asegurando que el show siga siendo un referente global para los amantes de la moda y el entretenimiento.