El gobierno de Estados Unidos ha despedido a 17 jueces de tribunales de inmigración en los últimos días, según informó el sindicato que los representa. La Federación Internacional de Ingenieros Profesionales y Técnicos, que representa a estos jueces, indicó que 15 jueces fueron despedidos sin causa el viernes y otros dos el lunes. Estos jueces trabajaban en tribunales de 10 estados, incluyendo California, Illinois, y Nueva York.
Los despidos ocurren en un contexto en el que los tribunales de inmigración están bajo una presión sin precedentes debido a las políticas de línea dura del gobierno del presidente Donald Trump. Estas políticas han llevado a un aumento en las deportaciones y a una mayor carga de trabajo para los tribunales, que ya enfrentan un retraso de aproximadamente 3.5 millones de casos. Matt Biggs, presidente del sindicato, criticó estos despidos, señalando que van en contra del interés público y empeoran los retrasos en los tribunales.
Además, los despidos han generado preocupación entre los solicitantes de asilo y los inmigrantes que se presentan en los tribunales, ya que podrían enfrentar mayores dificultades para acceder a la justicia. Los jueces de inmigración, que ya están sobrecargados de trabajo, ahora tendrán que lidiar con una mayor carga de casos, lo que podría afectar la calidad y la rapidez de las decisiones judiciales.
