El presidente Donald Trump aseguró este viernes que su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, le ha ofrecido «de todo» con el fin de evitar un enfrentamiento con Estados Unidos, en medio de una escalada de tensiones que incluye operaciones militares y amenazas de intervención en el país sudamericano. «Él me ha ofrecido de todo. ¿Sabes por qué? Porque no quiere meterse con Estados Unidos», declaró Trump en la Casa Blanca, respondiendo a preguntas sobre las supuestas negociaciones entre Caracas y Washington. Estas declaraciones llegan en un contexto de máxima presión, donde EE.UU. ha intensificado su presencia militar en el mar Caribe, destruyendo embarcaciones vinculadas al narcotráfico que, según la administración Trump, están asociadas al gobierno de Maduro.
Según The New York Times, las ofertas de Maduro incluirían abrir los sectores petrolero y minero a empresas estadounidenses, redirigir las exportaciones de petróleo desde China hacia EE.UU., y romper contratos con Rusia, Irán y China, sus principales aliados. Sin embargo, el Miami Herald añadió un nuevo elemento a la ecuación: la vicepresidenta Delcy Rodríguez y su hermano, el presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, habrían propuesto a Washington encabezar un gobierno de transición que excluya a Maduro, con el objetivo de evitar un colapso político y negociar una salida a la crisis. Estas propuestas, aunque no confirmadas oficialmente, reflejan la creciente desesperación del régimen venezolano, que enfrenta una economía en ruinas, sanciones internacionales y una crisis humanitaria sin precedentes.
El gobierno de Maduro ha rechazado estas versiones. La vicepresidenta Delcy Rodríguez desmintió las informaciones del Miami Herald, mientras que Maduro aseguró que el liderazgo político y militar del país está «más unido que nunca» para resistir lo que calificó como «agresiones» de Estados Unidos. Estas declaraciones se producen después de que Trump autorizara a la CIA a realizar operaciones encubiertas en Venezuela y amenazara con ataques terrestres contra supuestas bases del narcotráfico, luego de los bombardeos a embarcaciones que, según Washington, transportaban drogas con vínculos al gobierno venezolano.
La escalada militar de EE.UU. en la región, que incluye el despliegue de buques y la intensificación de patrullajes, ha aumentado la tensión a niveles comparables a los de 2019, cuando Trump reconoció a Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela. Aunque las sanciones y el aislamiento internacional han debilitado al régimen de Maduro, este sigue contando con el apoyo de las Fuerzas Armadas y de aliados como Rusia, China e Irán. Ahora, con las nuevas amenazas de Trump y la posibilidad de acciones encubiertas, el futuro político de Venezuela entra en una fase de alta incertidumbre, donde las ofertas de negociación —ya sean reales o tácticas— podrían ser el último recurso de Maduro para evitar una confrontación abierta con la superpotencia norteamericana.

















