Reunión de emergencia en la Casa Blanca con el reloj en contra
Con solo 36 horas antes del plazo límite, el presidente Donald Trump se reunió este lunes con los líderes del Congreso para intentar evitar un cierre parcial del gobierno federal, que comenzaría el 1 de octubre si no se aprueba un presupuesto temporal. La cita en la Casa Blanca reunió a los principales actores: el líder republicano de la Cámara Mike Johnson, el líder demócrata Hakeem Jeffries, el líder republicano del Senado John Thune, y el líder demócrata del Senado Chuck Schumer.
El riesgo de un «shutdown» Un cierre del gobierno implicaría:
- Suspensión de servicios no esenciales en agencias federales.
- Furloughs masivos: Cientos de miles de empleados públicos quedarían sin sueldo hasta que se alcance un acuerdo.
- Impacto económico: Retrasos en pagos y prestaciones sociales, afectando a millones de familias.
El punto de conflicto Los republicanos aprobaron en la Cámara un proyecto que extiende el financiamiento hasta noviembre, pero necesitan ocho votos demócratas en el Senado para superarlo. Los demócratas, sin embargo, exigen que se incluyan prórrogas para los subsidios de salud de la Ley de Cuidado de Salud Asequible, que vencen en diciembre, y la reversión de recortes en programas sociales. Trump, por su parte, ha amenazado con despedir empleados federales en lugar de retener sus salarios, una medida sin precedentes en cierres anteriores.
Posturas encontradas
- Republicanos: Insisten en que las negociaciones sobre salud deben darse después de evitar el cierre.
- Demócratas: Exigen garantías para la salud pública y acusan a Trump de provocar una crisis evitable.
- Rand Paul: El senador republicano se opone al proyecto actual, complicando aún más el escenario.
¿Qué puede pasar? El Senado votará el martes. Si no hay acuerdo, el gobierno cerrará parcialmente, afectando servicios y generando un nuevo episodio de inestabilidad política en EE.UU.
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