El acuerdo de cooperación entre República Dominicana y Estados Unidos para combatir el narcotráfico hasta abril de 2026 no solo tiene implicaciones para ambos países, sino que también podría redefinir la dinámica de seguridad en todo el Caribe, especialmente en Haití, un país que enfrenta una crisis humanitaria y de seguridad sin precedentes. Mientras República Dominicana fortalece su capacidad para interceptar drogas, hay preocupaciones de que los cárteles y bandas criminales puedan desplazar sus operaciones hacia territorios con menor vigilancia, como Haití, Jamaica o las Bahamas.
1. Haití: El riesgo de convertirse en el nuevo «hub» del narcotráfico
Haití, sumido en una profunda crisis política, social y de seguridad, es el país más vulnerable a un posible desplazamiento de las rutas de narcotráfico desde República Dominicana. Las bandas armadas que controlan gran parte del territorio haitiano ya tienen vínculos con cárteles internacionales, y un aumento en la presión sobre República Dominicana podría llevar a que los narcotraficantes busquen refugio en Haití.
A. La situación actual en Haití: Un estado fallido
- Gobierno débil: El vacío de poder tras el asesinato del presidente Jovenel Moïse en 2021 y la falta de elecciones han dejado al país en manos de bandas armadas y señores de la guerra.
- Control de las bandas: Grupos como G9, liderado por Jimmy «Barbecue» Chérizier, y G-Pèp dominan puertos, aeropuertos y rutas terrestres, facilitando el tráfico de drogas, armas y personas.
- «Haití es un estado fallido. Sin un gobierno funcional, las bandas y los cárteles operan con total impunidad», declaró un analista de seguridad de la ONU.
B. El narcotráfico en Haití: Una amenaza creciente
- Rutas de tráfico: Haití ya es utilizado por cárteles colombianos y mexicanos para mover cocaína hacia EE.UU. a través de lanchas rápidas y avionetas.
- «Las bandas haitianas trabajan como subcontratistas de los cárteles. Les permiten usar sus territorios a cambio de armas y dinero», explicó un agente de la DEA.
- Aumento de la violencia: En 2025, se registró un incremento del 40% en homicidios relacionados con el narcotráfico en Puerto Príncipe.
- «Las bandas están peleando por el control de las rutas de drogas. Esto ha llevado a una ola de violencia sin precedentes», comentó un periodista haitiano.
C. ¿Qué pasaría si los cárteles se mudan a Haití?
Si República Dominicana logra cerrar sus rutas con el apoyo de EE.UU., es probable que los cárteles desvíen sus operaciones hacia Haití, donde la falta de un gobierno funcional y la corrupción generalizada facilitan sus actividades.
- «Si los cárteles no pueden operar en República Dominicana, irán a Haití. Allí no hay quien los detenga», advirtió un experto en crimen organizado del Caribe.
- Consecuencias posibles:
- Aumento del tráfico de drogas a través de puertos haitianos como Cap-Haïtien y Les Cayes.
- Mayor violencia entre bandas por el control de las rutas.
- Infiltración de cárteles mexicanos y colombianos en las estructuras de poder haitianas.
2. Jamaica y Bahamas: ¿Próximos objetivos de los cárteles?
Además de Haití, otros países del Caribe como Jamaica y Bahamas también podrían verse afectados por un desplazamiento de las rutas de narcotráfico.
A. Jamaica: Un destino atractivo para los narcotraficantes
- Ubicación estratégica: Jamaica está cerca de las rutas marítimas hacia EE.UU. y tiene puertos bien conectados.
- Presencia de cárteles: Bandas jamaicanas como One Order y Clansman Gang ya tienen vínculos con cárteles mexicanos para el tráfico de marihuana y cocaína.
- «Jamaica es un punto de tránsito clave para la cocaína que va a EE.UU. y Europa. Si los cárteles pierden acceso a República Dominicana, podrían aumentar sus operaciones allí», explicó un oficial de la policía jamaicana.
- Riesgo de violencia: Un aumento en el tráfico de drogas podría llevar a más enfrentamientos entre bandas y las fuerzas de seguridad.
B. Bahamas: Un paraíso para el lavado de dinero
- Sistema financiero vulnerable: Bahamas es conocido por su banca offshore y lavado de dinero, lo que lo hace atractivo para los cárteles.
- Rutas marítimas: Las 700 islas de Bahamas son difíciles de vigilar, lo que facilita el tráfico de drogas en lanchas rápidas.
- «Los cárteles usan las Bahamas como punto de tránsito y para lavar dinero. Si República Dominicana se vuelve más riesgosa, podrían mover más operaciones allí», declaró un agente de la DEA.
- Presión sobre las autoridades: El gobierno bahameño ya está sobrecargado por el aumento del tráfico de migrantes y drogas.
3. El papel de República Dominicana en la seguridad regional
El acuerdo con EE.UU. no solo beneficia a República Dominicana, sino que también podría tener un efecto dominó en la seguridad del Caribe.
A. Fortalecimiento de la cooperación regional
- República Dominicana está trabajando con otros países caribeños para compartir inteligencia y coordinar operativos.
- «Estamos en conversaciones con Jamaica, Bahamas y las Antillas para crear una red de vigilancia conjunta», declaró un funcionario del Ministerio de Defensa dominicano.
- Iniciativas como CARICOM (Comunidad del Caribe) podrían jugar un papel clave en la coordinación de esfuerzos contra el narcotráfico.
B. Riesgo de «efecto globo»: ¿Si se aprieta en un lugar, se expande en otro?
- Los expertos advierten que, si República Dominicana logra cerrar sus rutas, los cárteles buscarán alternativas en otros países.
- «El narcotráfico es como un globo: si lo aprietas en un lado, se expande en otro. Hay que estar preparados para eso», explicó un analista de seguridad regional.
- Posibles soluciones:
- Fortalecer la cooperación con Haití, Jamaica y Bahamas para evitar que se conviertan en nuevos hubs de narcotráfico.
- Invertir en inteligencia y vigilancia en toda la región.
C. El papel de la OEA y la ONU
- La Organización de Estados Americanos (OEA) y la ONU han aplaudido el acuerdo, pero también han advertido sobre la necesidad de un enfoque regional.
- «La lucha contra el narcotráfico no puede ser solo de un país. Tiene que ser un esfuerzo coordinado en todo el Caribe», declaró un representante de la OEA.
- Se han propuesto programas de cooperación para fortalecer las capacidades de países como Haití y Jamaica.
4. ¿Qué pueden hacer los países del Caribe para prepararse?
Ante el riesgo de que los cárteles desvíen sus operaciones a otros territorios, los países del Caribe deben tomar medidas para fortalecer su seguridad:
- Invertir en tecnología de vigilancia:
- Drones, radares y sistemas de inteligencia artificial para detectar embarcaciones sospechosas.
- «Los países del Caribe necesitan los mismos recursos que República Dominicana para poder enfrentar a los cárteles», comentó un experto en seguridad marítima.
- Fortalecer la cooperación internacional:
- Compartir inteligencia con EE.UU., República Dominicana y otros aliados.
- «La información es poder. Si compartimos datos en tiempo real, podemos actuar antes de que los cárteles muevan sus cargamentos», explicó un agente de Interpol.
- Capacitar a las fuerzas de seguridad:
- Entrenamiento en tácticas de interceptación y análisis de inteligencia.
- «Necesitamos agentes mejor preparados para enfrentar a organizaciones criminales que están cada vez más sofisticadas», declaró un oficial de la policía jamaicana.
- Atacar las causas sociales del narcotráfico:
- Programas de desarrollo económico para reducir la pobreza y el desempleo, que son caldo de cultivo para el crimen organizado.
- «Si no damos alternativas a los jóvenes, siempre habrá alguien dispuesto a trabajar para los cárteles», advirtió un activista social haitiano.
5. El futuro de la seguridad en el Caribe: ¿Hacia una estrategia regional?
El acuerdo entre República Dominicana y EE.UU. podría ser el punto de partida para una estrategia regional contra el narcotráfico, pero su éxito dependerá de:
- La capacidad de los países caribeños para coordinar esfuerzos y compartir recursos.
- El apoyo internacional, especialmente de EE.UU. y la UE, para financiar tecnología y capacitación.
- La voluntad política de los gobiernos para combatir la corrupción y fortalecer las instituciones.
«El Caribe no puede enfrentar solo a los cárteles. Necesitamos una alianza regional con apoyo internacional. De lo contrario, el problema solo se moverá de un lugar a otro», concluyó un experto en política exterior.
