El expresidente de la República y líder de la Fuerza del Pueblo, Leonel Fernández, lanzó una contundente crítica contra el Gobierno durante una multitudinaria marcha realizada este domingo en Santo Domingo. En un discurso cargado de firmeza, Fernández aseguró que «el Gobierno está en bancarrota», una afirmación que resonó entre los miles de manifestantes que acompañaron la protesta.
Fernández no solo cuestionó la situación económica del país, sino que también envió un mensaje directo a las autoridades: «Es hora de que recojan sus maletas». Según el líder opositor, la crisis que atraviesa el país no es solo financiera, sino también de gestión y credibilidad. «No hay recursos para pagar las obligaciones del Estado, no hay capacidad para responder a las demandas sociales, y lo peor es que no hay voluntad política para cambiar el rumbo», declaró Fernández, quien advirtió que la situación actual es insostenible.
La marcha, convocada bajo el lema «Marcha del Pueblo», reunió a miles de ciudadanos que exigen cambios profundos en la gestión gubernamental. Fernández, quien ha sido una figura clave en la política dominicana durante décadas, aprovechó la ocasión para llamar a la unidad de la oposición y a la movilización ciudadana. «No podemos seguir permitiendo que la improvisación y la falta de planificación nos lleven al abismo», afirmó, mientras los asistentes coreaban consignas en su apoyo.
El expresidente también hizo un llamado a la transparencia y a la rendición de cuentas, señalando que la ciudadanía merece saber en qué se han invertido los recursos públicos y por qué el país enfrenta una crisis económica sin precedentes. «No es solo un problema de dinero, es un problema de honestidad y de compromiso con el pueblo», recalcó.
La declaración de Fernández ha generado un intenso debate en el país. Mientras sus seguidores ven en sus palabras un reflejo de la realidad que viven millones de dominicanos, el Gobierno aún no ha emitido una respuesta oficial. Sin embargo, analistas políticos señalan que esta acusación podría aumentar la presión sobre las autoridades para que presenten un plan claro que permita superar la crisis.
En un contexto donde la inflación, el desempleo y la falta de servicios básicos afectan a gran parte de la población, las palabras de Fernández han resonado con fuerza. Muchos ciudadanos ven en su liderazgo una alternativa para enfrentar los desafíos que el país enfrenta, mientras que otros esperan que el Gobierno tome medidas concretas para estabilizar la economía y recuperar la confianza de la población.
