El exdirector de Casinos y Juegos de Azar, Óscar Chalas Guerrero, se declaró culpable ante la justicia de haber recibido dinero de bancas de apuestas ilegales a cambio de permitirles operar, como parte de un acuerdo con la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (PEPCA). Como parte del pacto, Chalas Guerrero devuelve RD$20 millones al Estado, incluyendo RD$17 millones en cheques y dos vehículos valorados en casi RD$3 millones.
La confesión ante el Cuarto Juzgado de Instrucción
Durante la audiencia, Chalas Guerrero, de 70 años, admitió haber recibido pagos irregulares de bancas de apuestas que operaban sin licencia legal. El exfuncionario declaró que el entonces ministro de Hacienda, Donald Guerrero, tenía conocimiento de los cobros realizados a las bancas irregulares, y que en una ocasión propuso detener la estructura de recaudación ilegal, pero se le ordenó continuar con las operaciones.
«Yo acepto que esos hechos pasaron y no me siento orgulloso», expresó Chalas Guerrero ante la jueza Altagracia Ramírez, pidiendo perdón a la sociedad dominicana por su participación en el esquema corrupto.
La red de corrupción y la ‘Operación Calamar’
Chalas Guerrero reveló que la red de recaudación ilegal estaba integrada por otros funcionarios y empresarios, entre ellos:
- Manuel Emilio Jiménez (Mimilo)
- José Arturo Ureña
- Fernando Crisóstomo Herrera
Todos ellos están siendo investigados en el marco de la Operación Calamar, un caso que ha destapado una tela de corrupción en el sector de los juegos de azar.
El acuerdo con la PEPCA
La representante de la PEPCA, Mirna Ortiz, indicó que Chalas Guerrero colaboró de manera libre y voluntaria, aportando información valiosa que fortalece el expediente contra los demás acusados. Como parte del acuerdo, el exfuncionario no será perseguido penalmente, a cambio de su cooperación y la devolución de los fondos recibidos ilegalmente.
El período de Chalas Guerrero al frente de Casinos
Chalas Guerrero dirigió la Dirección de Casinos y Juegos de Azar desde septiembre de 2016 hasta marzo de 2019, período en el que, según las investigaciones, se habrían ejecutado los pagos irregulares ahora admitidos.
El impacto social y político
Este caso ha generado indignación en la sociedad dominicana, donde la corrupción en el sector de los juegos de azar ha sido un problema recurrente. La Operación Calamar ha puesto en evidencia cómo funcionarios públicos y empresarios coludieron para beneficiarse económicamente a costa del Estado.
¿Qué sigue en la investigación?
Con la confesión de Chalas Guerrero y la devolución de los fondos, la PEPCA avanza en la investigación contra los demás implicados. Se espera que en las próximas semanas se presenten nuevas acusaciones contra los demás miembros de la red.

















