Cuando alguien está pasando por una de enfermedad lo que más necesita de quienes le rodean son palabras de esperanza y aliento.
La enfermedad puede generar temor, angustia y preocupación, incluso en muchos casos las personas pueden llegar a perder la fe y la confianza en Dios.
Estos versículos bíblicos traerán esperanza a quienes padecen alguna enfermedad:
«Esforzaos y cobrad ánimo; no temáis, ni tengáis miedo de ellos, porque Jehová tu Dios es el que va contigo; no te dejará, ni te desamparará», Deuteronomio 31:6.
«Envió su palabra, y los sanó, Y los libró de su ruina. Alaben la misericordia de Jehová, Y sus maravillas para con los hijos de los hombres», Salmos 107:20-21.
«Jehová abre los ojos a los ciegos; Jehová levanta a los caídos; Jehová ama a los justos», Salmos 146:8.
«El corazón alegre constituye buen remedio; Mas el espíritu triste seca los huesos», Proverbios 17:22.
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«No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia», Isaías 41:10.
«He aquí que yo les traeré sanidad y medicina; y los curaré, y les revelaré abundancia de paz y de verdad», Jeremías 33:6.
«Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas», Mateo 11:28-29.
«¿Está alguno enfermo entre vosotros? Llame a los ancianos de la iglesia, y oren por él, ungiéndole con aceite en el nombre del Señor. Y la oración de fe salvará al enfermo, y el Señor lo levantará; y si hubiere cometido pecados, le serán perdonados. Confesaos vuestras ofensas unos a otros, y orad unos por otros, para que seáis sanados. La oración eficaz del justo puede mucho», Santiago 5:14-16.
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