El 28 de octubre de 2025, la NASA y Lockheed Martin hicieron historia al realizar con éxito el primer vuelo de prueba del X-59, un avión experimental diseñado para romper la barrera del sonido sin generar estampidos sónicos. Este logro, fruto de siete años de desarrollo, marca el inicio de una nueva era en la aviación supersónica comercial, que podría revolucionar los viajes aéreos al eliminar una de las principales barreras: el ruido ensordecedor.
Detalles clave del X-59:
- Diseño innovador: Fuselaje largo y delgado, nariz afilada de 11 metros y motor montado en la parte superior, optimizados para dispersar las ondas de choque y reducir el ruido a 75 decibelios (similar al cierre de una puerta de auto).
- Tecnología de visión: El piloto no tiene visibilidad frontal directa debido al morro alargado. En su lugar, utiliza el External Vision System (XVS), un sistema de cámaras y realidad aumentada que proyecta imágenes en tiempo real en la cabina.
- Primer vuelo: Despegó desde Skunk Works en Palmdale, California, y aterrizó en la Base Aérea Edwards, completando una hora de maniobras controladas a 12,000 pies de altitud.
Objetivo del proyecto QueSST: El programa Quiet SuperSonic Technology (QueSST) busca demostrar que es posible volar a Mach 1.4 (1,500 km/h) sin producir los estampidos sónicos que llevaron a la prohibición de vuelos supersónicos sobre tierra en 1973. Si los resultados son positivos, la FAA podría reconsiderar las restricciones, abriendo la puerta a vuelos comerciales supersónicos sobre zonas pobladas.
Próximos pasos:
- Pruebas acústicas con micrófonos en el desierto de Mojave.
- Vuelos sobre comunidades para evaluar la percepción pública del nuevo «golpe sónico».
- Posible aplicación en transporte de órganos, suministros médicos y respuesta a emergencias.
Impacto potencial: Reducir a la mitad los tiempos de vuelo intercontinentales, transformando la logística global y la conectividad.
