Después de 19 años de batalla legal, los taxistas de Nueva York han alcanzado un acuerdo histórico de $140 millones con la Ciudad. La demanda colectiva, que representaba a casi 20,000 conductores, cuestionaba la falta de audiencias justas para aquellos cuyas licencias fueron suspendidas tras un arresto.
El fallo judicial ordena compensaciones para los conductores afectados, con indemnizaciones que oscilan entre varios cientos de dólares y $36,000, según la duración de la suspensión. La mayoría de los arrestos fueron por delitos menores y ocurrieron fuera del horario laboral.
Este veredicto marca una victoria significativa para los taxistas, quienes perdieron colectivamente más de 3 millones de días de trabajo debido a suspensiones injustificadas entre 2003 y 2020.
