El Rol de la Diáspora
La diáspora dominicana ha levantado su voz en foros internacionales, exigiendo que las autoridades dominicanas prioricen la seguridad vial y la protección de las mujeres. Estas comunidades ven con preocupación cómo estos problemas afectan la imagen del país y dificultan su desarrollo social y económico.
Comentarios de la Comunidad: Patricia Pérez, líder comunitaria en Nueva York: «Es indignante que estos problemas se perpetúen año tras año. La diáspora debe exigir que las autoridades rindan cuentas y tomen acciones efectivas». Patricio Mota: «La violencia y los accidentes son reflejo de una sociedad en estrés constante. Es urgente invertir en salud mental y educación en valores». Ramona Felix: «La diáspora puede ser un puente para impulsar políticas más efectivas desde fuera. No podemos quedarnos callados».
Por José Zabala, creador de contenido.
New york: República Dominicana enfrenta una crisis estructural que la posiciona en los primeros lugares de estadísticas lamentables: el país ocupa el segundo lugar en América Latina en violencia machista y el primero en muertes por accidentes de tránsito. Estas cifras alarmantes generan gran preocupación tanto en el territorio nacional como en la diáspora dominicana, que observa con inquietud el impacto humano y social de estos problemas.
Violencia Machista: Un Desafío Persistente
Según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), en 2023 se registraron 3,897 feminicidios en 27 países de la región, lo que equivale a 11 mujeres asesinadas cada día por razones de género. República Dominicana ocupa el segundo lugar con una tasa de 2.4 casos por cada 100,000 mujeres. Estos crímenes, que en su mayoría permanecen impunes, reflejan una realidad sombría sostenida por factores culturales, sociales y económicos.
En América Latina, entre el 63 % y el 76 % de las mujeres han sufrido algún tipo de violencia por parte de parejas o familiares. En República Dominicana, la falta de implementación de leyes como la 24-97, que tipifica la violencia de género, agrava el problema. Movimientos sociales como «Ni Una Menos» han visibilizado esta problemática, pero los avances son insuficientes frente al contexto de desigualdad y ausencia de recursos para proteger a las víctimas.
Accidentes de Tránsito: La Epidemia Silenciosa
República Dominicana lidera las tasas de mortalidad por accidentes de tránsito en América Latina, con 1,994 muertes en 2023, según datos de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett). De estas muertes, el 83 % corresponde a hombres, y las motocicletas son responsables de la mayoría de los casos.
La Ley 63-17, que regula la movilidad y seguridad vial, enfrenta grandes desafíos en su aplicación. Las principales causas incluyen imprudencias como el exceso de velocidad, manejo temerario y el no uso de casco protector. Además, factores como el mal estado de las vías y la falta de alumbrado contribuyen al alto índice de siniestros.
Impacto Humano y Económico
Ambos problemas tienen consecuencias devastadoras en la sociedad dominicana. Desde el duelo y trauma psicológico en las familias, hasta un costo económico estimado entre 2,200 y 3,400 millones de dólares anuales por accidentes de tránsito, lo que equivale al 3.2 % del PIB.
Las mujeres enfrentan además un impacto desproporcionado: la violencia de género deja no solo víctimas mortales, sino también sobrevivientes que deben lidiar con secuelas físicas y emocionales. A nivel global, según ONU Mujeres, 736 millones de mujeres han sufrido violencia alguna vez en su vida.
Acciones Urgentes
El panorama exige una respuesta integral. En el caso de la violencia machista, es crucial garantizar la implementación efectiva de leyes, proporcionar más refugios y aumentar la sensibilización desde la educación básica.
Para los accidentes de tránsito, es necesario reforzar la fiscalización, mejorar la infraestructura vial y fortalecer las campañas de educación vial. Estas medidas deben ser complementadas con una agenda política donde la seguridad ciudadana sea prioridad.
República Dominicana debe tomar acciones concretas para superar estas crisis, transformando las alarmantes estadísticas en historias de éxito que inspiren confianza en el futuro del país. La diáspora, como vigilante activa, seguirá alzando su voz hasta que se vean cambios reales.
Foto externa…
José Zabala
Creador de contenido, defensor de la comunidad dominicana.