Sarah Daniels, profesora en Pensilvania: “Liz Cheney me ha hecho reflexionar mucho. Nunca pensé que apoyaría a una demócrata, pero creo que Harris es la opción responsable. Trump no es alguien en quien confíe para liderar nuestro país de manera segura.”
Por José Zabala, creador de contenido
New York: En un movimiento inusual, varios republicanos de alto perfil, encabezados por la ex congresista Liz Cheney, han decidido respaldar a la vicepresidenta Kamala Harris en su campaña presidencial de 2024. Durante una serie de eventos en estados clave como Pensilvania, Wisconsin y Michigan, Cheney apareció junto a Harris, instando a los conservadores a reconsiderar su apoyo al expresidente Donald Trump y a cruzar las líneas partidarias en favor de Harris.
Michael Anderson, veterano en Michigan: “Como conservador, siempre he valorado la defensa de la democracia. Harris ha demostrado que tiene la capacidad de unir, y su postura sobre la seguridad nacional y el respeto por nuestros aliados me da la confianza de que será una líder efectiva.”
El lunes, en un foro abierto en el Royal Oak Theatre de Michigan, Harris y Cheney hablaron directamente a los votantes conservadores. En su discurso, Cheney subrayó la importancia de elegir a alguien que respete las instituciones democráticas, aludiendo a su preocupación por las amenazas que representa Trump para la democracia estadounidense. “Los verdaderos conservadores aman a su país y quieren que continúe”, dijo Cheney, reforzando su llamado a respaldar a Harris.
Este respaldo ha causado un revuelo tanto en los círculos republicanos como demócratas, marcando un momento decisivo en la campaña de Harris, quien está buscando atraer a votantes moderados en estados clave.
El mensaje a los votantes conservadores
La campaña de Harris ha centrado su mensaje en la necesidad de un liderazgo estable, comprometido con la democracia y la unidad nacional. Cheney, quien perdió su escaño en el Congreso tras votar a favor del juicio político a Trump por la insurrección del 6 de enero, ha sido una figura clave en la defensa de estos valores. Durante el evento, Cheney criticó el enfoque de Trump hacia la política exterior, especialmente su posición respecto a la OTAN, y su retórica divisiva.
Por su parte, Harris elogió el coraje de Cheney por mantenerse firme en sus principios, aun cuando esto le costó su carrera política. Ambas destacaron la importancia de proteger las instituciones democráticas y evitar el retorno de una administración que, según ellas, pone en riesgo la estabilidad del país.
John Mitchell, empresario en Wisconsin: “Siempre he sido un votante republicano, pero después de lo que hemos visto con Trump, no puedo seguir apoyándolo. Kamala Harris, aunque no estoy de acuerdo con todas sus políticas, representa estabilidad y respeto por nuestras instituciones, algo que es crucial para el futuro de nuestro país.”
La gira de Harris y Cheney por estos estados busca, justamente, ganar el apoyo de aquellos republicanos que se sienten desilusionados con el actual liderazgo del partido. Mientras tanto, la campaña de Trump se enfoca en otros sectores, buscando mantener su base de apoyo, especialmente en comunidades que han expresado críticas hacia las políticas exteriores de Harris.
Con figuras como Liz Cheney respaldando a Harris, la dinámica electoral se está transformando, y ambos lados reconocen que estas elecciones definirán el futuro de la democracia en los Estados Unidos.