Por José Zabala, creador de contenido
Santo Domingo – En la República Dominicana, el mediodía es una franja horaria especial que, a diferencia del “prime time” nocturno, presenta desafíos particulares para los programas de televisión como “De Extremo a Extremo”, “El Show del Mediodía” y “El Súper Meridiano”. Aunque todos compiten por la atención de la audiencia, ¿quiénes son realmente los que están frente a la pantalla a esa hora?
“En la República Dominicana, ver televisión al mediodía es casi un lujo, porque el trabajo, las clases y las actividades cotidianas dejan poco tiempo para sentarse a disfrutar de un programa.”
Un comentario positivo de José Zabala: “Felicito a los tres programas ‘De Extremo a Extremo’, ‘El Show del Mediodía’ y ‘El Súper Meridiano’ porque, a pesar de tener un segmento de público reducido, han sabido mantenerse con esfuerzo y dedicación. Cada uno, desde su estilo, aporta entretenimiento, cultura y alegría a la sociedad dominicana, conectando con las familias y dando espacio a talentos locales. Los tres merecen ser ganadores por su contribución al fortalecimiento de la televisión nacional.”
La televisión de mediodía es un terreno complicado para conquistar audiencias. Si bien las encuestas y las mediciones aportan datos, su alcance es limitado y no siempre reflejan la realidad de un país con una población laboralmente activa a esa hora. Para las productoras y para los anunciantes, entender esta dinámica es clave para valorar el verdadero impacto de estos programas. Porque, al final, no solo importa cuántos los ven, sino quiénes los ven y por qué se quedan.
Un horario difícil para la audiencia
El mediodía es, por naturaleza, un momento de actividad y movimiento:
• Los jóvenes y estudiantes suelen estar en clases, en la universidad o realizando trabajos prácticos.
• Los profesionales están en sus oficinas o en labores que no les permiten seguir una programación continua.
• Los trabajadores del comercio y del sector informal están en plena faena, lo que limita su tiempo para consumir televisión.
• Los intelectuales y académicos, por su parte, suelen estar en reuniones, investigaciones o en horarios de trabajo que no les permiten sentarse a ver la TV al mediodía.
En cambio, gran parte del público que consume estos programas al mediodía está compuesto por:
• Amos y amas de casa que, mientras preparan el almuerzo, encienden el televisor como compañía.
• Personas mayores y jubilados que permanecen en casa y buscan entretenimiento y compañía.
• Trabajadores por turnos rotativos o informales que, entre labores, hacen pausas para ver fragmentos de los programas, desempleado, jóvenes con horario escolar en la tarde y algunos niños que siempre se da en los barrios populares y de menos recursos .
El contenido: música, variedades y entretenimiento
Tanto “De Extremo a Extremo”, “El Show del Mediodía” como “El Súper Meridiano” se centran en contenido ligero: música, humor, entrevistas, entretenimiento y farándula. Este tipo de formato busca conectar con el público general y atraer anunciantes, aunque en ocasiones se aleja de la reflexión o de temas de análisis profundo.
¿Qué dicen las empresas encuestadoras?
Las empresas encuestadoras suelen utilizar mediciones por segmentos y métodos como people meters, encuestas domiciliarias o paneles de audiencia. Sin embargo, la limitación de estas mediciones es que a menudo se basan en un segmento muy reducido de la población que está en casa al mediodía. Por eso, muchos cuestionan la validez de comparar programas en un horario con audiencias tan fragmentadas.
¿Cuál programa es más visto en las provincias?
En las provincias, la televisión de mediodía tiende a tener menos penetración que en la capital. Allí, la gente suele trabajar en la agricultura, el comercio y el transporte, y el mediodía es hora de almuerzo o descanso. Sin embargo, se observa que programas como “De Extremo a Extremo” han ganado más popularidad por su enfoque en la música urbana y los artistas jóvenes, mientras que “El Show del Mediodía” y “El Súper Meridiano” mantienen el respaldo de audiencias más tradicionales y adultas.
Reflexión sobre el mediodía y la televisión
En la República Dominicana, ver televisión al mediodía es casi un lujo que pocos pueden permitirse. La audiencia está dividida entre las obligaciones laborales, los estudios y las labores domésticas. Por eso, el impacto real de estos programas debe medirse no solo por el rating, sino por la conexión emocional que logran con el público que puede verlos.
Además, el televidente siempre tiene el control en la mano y vive cambiando de canal en su corto momento para ver televisión al mediodía, lo que demuestra la competencia feroz por captar la atención de la audiencia.